ahogarme en tu voz una céntima de segundo,
y en esa céntima hundirme en tu aliento entrelazado a mi orgullo.
vencerme a mí mismo a la hora de elegirte,
y escucharte decir esas palabras que ni siquiera te creo,
pero me gustaría hacerlo...
venderte mis celos,
hacerme millonario,
y una vez sin ellos, volver a tu brazos.
Sentirte tan cerca, y seguir esperándote...
volver a elegirte y sentirme callado.
miércoles, 17 de febrero de 2010
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4 comentarios:
Mingo, dear:
ando sin internet en estos tiempos, se me murió el modem. Así que estoy sentada en un sillón de bar, acá, en un cibertodo, tengo al lado mi paraguas, me acaban de sacar sangre, me tira la curita, me siento tonta, tontísima.
Quiero que sepa que leí sus palabras en netinquietepas, que evidentemente esos raros tubos nuestros coincidieron, y que me alegra, me alegra, haberle arrancado una sonrisa. Qué cosa más linda.
Gracias.
Debería mandarle por algún mail público (o semi) que ud tenga una canción y un poema, lo cual vendría a ser como un abrazo.
me llevo un globo!
Domingo estimado,
tengo una duda important, ¿le llegó mi mail? No vaya a ser que lo haya mandado a cualquier otra dirección, y zas! nada de poema en sus ojos!
Dígame, por farol!
abrazonimio.
hoy no leo. hoy solo miro las fotografias apacibles anunciando abril
Hoy es domingo: pienso en ud. ¿Cómo está?
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